martes, 12 de enero de 2010

Concentración de Cinturones Negros


Se ha convertido en costumbre que cuando enero comienza a dar sus primeros pasos, los cinturones negros del Club Shotokan se den cita en la sede del club para realizar un entrenamiento especial de bienvenida al año nuevo llamado ”Akemashite Omedeto Gozaimasu” .


En esta ocasión han sido un total de veintiún altos grados de Karate, Nihon Tai Jitsu y Kick-Boxing los que se han reunido para mantener las tradiciones marciales, en las que se considera esencial realizar un entrenamiento especial intenso para renovar el espíritu y la dedicación al budo.


El acto dio comienzo a las 19 horas con la bienvenida a todos los asistentes por parte de Javier Fernández-Bravo, director técnico, quien agradeció su respuesta a la convocatoria para participar en este acto. Seguidamente Juan J. Espadas aprovechó para adelantar alguna de las actividades programadas para 2010 y felicitó a los allí presentes por los logros conseguidos por el Club Shotokan el pasado años, emplazándoles a mantenerse fieles al “ideario shotokanero” y seguir acudiendo a estos entrenamientos durante otros treinta años más. Tras estas breves palabras, comenzó el acto propiamente, y que sirve para dar comienzo a la temporada de entrenamiento invernal “Kangeiko” , contando con las siguientes partes: Entrenamiento con los maestros. Una práctica de carácter polivalente y multidisciplinar que pudo ser seguida fácilmente por todos. Javier Fernández-Bravo presentó un trabajo sobre golpes de codo “Hiji Ate Kihon No Kata” y su potencialidad ante diferentes situaciones combate cuerpo a cuerpo. Por parte, Juan J. Espadas dirigió su exposición a analizar los movimientos del kata Jitte (“diez manos”) y su aplicación defensa personal (“Goshin Jitsu”).


Concluido el entrenamiento, se procedió a la entrega de los diplomas de Cinturón Negro a los alumno que lo han conseguido en este 2009 (o anteriores), para seguir con la Renovación del Juramento de Cinturón Negro (un manifiesto de compromiso personal en los principios del bushido), que en este caso fue pronunciado por Sergio Labrador. Después se realizaron las Peticiones para el Nuevo Año, según la tradición japonesa, para terminar descorchando unas botellas de sidra y brindando por un 2010 pretórico de buenos resultados.