martes, 28 de febrero de 2012

Muerte Súbita Cardiaca Causada por Commotio Cordis


La muerte súbita cardíaca (MSC) por commotio cordis (CC) hace referencia a aquella que se desencadena tras un impacto en la región precordial (zona central torácica coincidente con la ubicación del corazón), de escasa energía y a veces aparentemente trivial que produce una parada cardiorrespiratoria (PCR). La ausencia de lesión macroscópica debida al impacto diferencia a la CC de la contusión cardíaca en que una colisión de alta energía produce lesiones miocárdicas y de la caja torácica subyacente.

En 1995  Maron et al. Publican 25 casos de víctimas de  CC de entre 3 y 19 años de edad, percatando a la comunidad sanitaria y público en general de la importancia de esta patología que hasta entonces se le había prestado escasa atención en la literatura científica. En 1996 se puso en marcha en EEUU el U.S. Commotio Cordis Registry en Minneapolis, habiendo registrado 224 casos desde su creación. La CC ocurre predominantemente en niños y adolescentes, con una edad promedio de 15+- 9 años. Un 26% de las víctimas eran menores de 10 años y solo un 9% de 25 años o mayores. El 95% eran varones y la mayoría (78%) de raza blanca. Esta susceptibilidad en menores se ha atribuido a la estructura más estrecha (con un mayor índice de superficie entre siluete cardíaca/caja torácica), y más deformable de la pared torácica; todo ello favorecería una mayor transmisión de energía al miocardio. La caja torácica ya desarrollada, más ancha y consistente del adulto explica la relativamente baja frecuencia de CC incluso en el seno de deportes violentos y de contacto. Cabe destacar que el 50% de las muertes se produjeron por impactos banales fuera del ámbito deportivo como bolas de nieve, caídas accidentales durante juegos...

Según estudios experimentales en animales deben darse dos circunstancias determinantes para desencadenar CC. La primera es la localización del impacto, que ha de producirse directamente sobre el centro de la silueta cardíaca (paraesternal izquierdo). El segundo determinante concierne al momento exacto del impacto, que debe ocurrir con un estrecho margen de 10 a 20 milisegundos, aproximadamente un 1% de la duración total del ciclo cardíaco. Este periodo es especialmente vulnerable para la aparición de  fibrilación ventricular directa (FV), arritmia mortal si no se trata precozmente. Si el impacto se produce en otros momentos del ciclo cardíaco pueden aparecer otro tipo de arritmias transitorias sin repercusión hemodinámica.


El conocimiento de este tipo de MSC es necesario para su prevención, reconocimiento y actuación inmediata para evitar un desenlace fatal y trágico dado las edades en que se suele producir. En las artes marciales donde los impactos torácicos son habituales debemos estar atentos a cualquier pérdida de consciencia o inestabilidad tras un contacto en el centro del tórax. Los protectores torácicos comercializados han sido diseñados para prevenir traumatismos torácicos más que la CC, y no ofrecen una plena protección contra la arritmia producida por impacto

De hecho en la serie de casos del U.S. National Commotio Registry  casi un tercio de los deportistas fallecidos por CC en deportes de competición llevaban una protección torácica. Aún no se ha implementado un protector precordial que haya demostrado ser eficaz contra la CC.
       
Ante un caso de CC debemos actuar inmediatamente reconociéndolo y aplicando el protocolo de Soporte Vital Básico (SVB), activando los servicios sanitarios de emergencia (112), iniciando precozmente maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP), incluyendo el uso del DEA (desfibrilador externo automático) como único tratamiento eficaz para revertir una arritmia mortal. Por ello desde este artículo se anima a los instructores y practicantes de artes marciales en particular y otros deportes y a la población en general a que hagan cursos sobre SVB y uso del DEA. También sería conveniente que en cada gimnasio o club se contara con un desfibrilador ya que el tiempo desde que se produce la MSC hasta que se utiliza el DEA es fundamental para la total recuperación sin secuelas posteriores.
Este artículo no pretende ser alarmista, sino aportar conocimientos sobre un tipo de MSC que aunque muy infrecuente no está exenta de producirse y así estar preparados para actuar con prontitud y eficacia.

Antonio Mora Alcolao
Enfermero de Atención Primaria
Colaborador de la Real Federación Española de Fútbol
Instructor de Soporte Vital Avanzado